Música del blog
martes, 27 de noviembre de 2012
Persiguiendo un sueño.
Cuando persigues un sueño, procuras que todo lo relacionado con él, sea lo mejor posible. Si deseas hacer algo, y sueñas con ello, por muy difícil, y por mucho trabajo que cueste, lucha por él. Haz todo lo posible para conseguirlo. Y cuando lo hagas serás grande, contigo mismo.
lunes, 26 de noviembre de 2012
PESADILLA (Parte 7)
Volvemos a girar y a girar. Pero esta vez, cuando salimos a
la superficie, estamos en la otra punta de la piscina. Esta vez el que se
ahogaba era yo, porque no me dio tiempo a coger aire. Cuando la cosa se relajó
un poco, mi hermano pequeño y yo decidimos que lo mejor sería coger una barca e
irnos al mar. Allí estaríamos más seguros, ya que no da con tanta fuerza la ola
en el interior. Preparamos una canoa y la bajamos a la playa. Le dije que
subiese a la piscina a avisar a mamá, papá, y a Alex, y me quede sentado en la
canoa. Pero me di cuenta.... tarde.
El mar empezó a retroceder de nuevo, y sabía lo que venía
después. Corrí todo lo que pude escaleras arriba, y vi a mis padres y mis
hermanos venir hacia aquí. Les indiqué y grité que corriesen y diesen media
vuelta.... pero no dio tiempo. Sentí el azote del mar a mis espaldas, chocar
contra el mirador de la piscina y de repente, todo se volvió oscuro y me
encontraba de nuevo, debajo del agua. Comencé a dar vueltas y vueltas, me
chocaba con todo, y me arañe varias veces. La herida suturada del brazo se
volvió a abrir, y vi como la sangre no paraba de brotar, y el agua se teñía de
rojo a mi paso. Me hice varias heridas más por las piernas, y me golpee dos o
tres veces la cabeza..... Aquello era lo más horrible que me había podido
imaginar. Deseaba....... morir.
Se acabó, pero de otra manera. Respire
fuertemente. Estaba tumbado en el suelo empapado. El agua me había dejado en
una zona alta de la colina donde se situaba el hotel. Estaba totalmente
cubierto de rojo. No paraba de sangrar por varias zonas. Pero eso no me
preocupaba ahora...... Debía encontrar de nuevo a mi familia..... Con vida.
Aqui me desperté frustrado y llorando, núnca sabré que ocurrió al final... y como acaba esta horrible.... pesadilla.
PESADILLA (Parte 6)
Era mi hermano
mediano. Estaba entrando por la puerta. Y a él le seguían detrás, mi hermano
pequeño y mis padres. Corrí hacia mi hermano mediano, y lo abracé con fuerza. Llorando.
Pero al momento, lo cogí y lo estampe contra la pared. Y empecé a gritarle
medio llorando.
-¡No vuelvas a separarte de mi!, ¿de acuerdo? ¡Nunca más te
alejes!
Y rompí a llorar y nuevamente lo abrace, luego me dirigí
hacia mis padres y mi hermano pequeño y los rodee hasta asfixiarlos. La zona de
la piscina ya no estaba tan inundada. Mi hermano pequeño se fue hacia la
piscina, mientras que mis padres, mi otro hermano y yo nos quedamos hablando en
corro sobre lo ocurrido y tal...... pero no había acabado aún.... Fue en el
momento cuando escuché a otras personas gritar con la suficiente claridad.
-¡Otra ola....! ¡Viene otra ola!
Me giré, y vi el mar furioso que venia a desahogarse de
nuevo contra nosotros. Corrí hacia mi hermano pequeño que estaba en la piscina y
le grité que se hundiese dentro, que se metiese en la piscina. Corrí todo lo
que pude y me hundí con él, lo abrace debajo del agua y me lo lleve a la pared
de la piscina con el tiempo suficiente para que el mar nos azotara de nuevo. Sentí
como la ola pasaba, y empezamos a dar unas cuantas vueltas bajo el agua. Salimos
al exterior, mi hermano casi se ahoga, le sacudo la espalda para que tosa el
agua y no da tiempo a más que empujarle la cabeza de nuevo al interior de la
piscina, cuando otra ola se echa encima de nosotros.
Continuar historia.
Continuar historia.
PESADILLA (Parte 5)
Observé mi alrededor, la gente estaba desesperada, los heridos
reposaban en las mesas, aquello era el infierno. Vi al que me ayudó venir hacia
mí. Me miró el brazo, tenía bastante mejor aspecto, y estaba totalmente suturada
la herida. Aunque he de decir que el azul, era un poco raro para los puntos.
Pero me quedaba hasta bien. La cabeza ya no me sangraba, y podía oír. Le
sonreí.
-Gracias.
-No tienes que darlas, solo he hecho mi trabajo. Soy médico.
Y estoy intentando ayudar a todos los que puedo en este momento.
Volví a sonreírle, pero al momento, esa mirada desapareció.
-Mi familia.....
-No pierdas la esperanza, hay mucho alboroto, quizás estén,
pero no los hayas visto. ¿Por qué no sigues buscándolos? Nunca te des por
vencido, ¿vale?
Me sonrió, me acarició la barbilla y se marchó a la mesa de al
lado. Yo asentí y me quedé observándolo. Me incorporé, pero por poco me caigo
por no conseguir mantener el equilibrio con las piernas. Me sostuve en pie. Y
caminé, observando a cada lado, todos los heridos que había, por si los veía. Pero
no había suerte. Me recorrí todo el bar, y cuando avanzaba hacía la entrada, lo
vi.
Continuar historia.
Continuar historia.
PESADILLA (Parte 4)
Una persona se acerca a mí, y me empieza a hablar... le hago
la señal de que no oigo nada y me comprende. Mediante gestos, me guía hasta una
de las mesas de aquel lugar y me ofrece a tumbarme. En ese momento, comprendí
lo que intentaba hacer. Quería ayudarme.... quería.... curarme. Me quitó la
camiseta, me la colocó hecha una lechuga
en la cabeza a modo de trapo para cortar la hemorragia y empezó a observarme
los oídos , a hablarme... ¿o me estaba gritando? Quería comprobar la gravedad
de la situación, luego me examinó la herida del brazo. Grité, me dolió tanto
como si me clavasen un cuchillo muy lentamente en el corazón. Creo que captó la
idea por que se apartó y me hizo unas señales, pero no le entendía, entonces se
fue y volvió con un papel escrito:
"No te preocupes, te pondrás bien. Ahora estás a
salvo."
Esas palabras me tranquilizaron un instante. Empezó a hacer
señas a otras personas, no las veía con claridad. Entonces algo me rozó la
herida. Un paño sumamente frío y húmedo fue colocado en la zona. El dolor era
indescriptible y empecé a gritar como un histérico. Entonces vi a una de las
camareras traer una aguja e hilo azul de costura normal. Sabía lo que estaba
ocurriendo. Noté el primer pinchazo, el dolor era infernal, una mezcla de ardor
como si metieses la mano en una llama de la chimenea y cuando te cortas con un
cuchillo lentamente mientras pelas patatas.... No paraba de gritar, y la cabeza
seguía sangrando...... Me desmayé. Cuando desperté, me levante de golpe de la
mesa. Todo a mi alrededor era un jaleo, me tape los oídos porque era demasiado
ruido para mi en este momento...... ruido......... ¡Volvía a escuchar! Pero la
alegría duró menos de tres segundos. Empecé a pensar..... Solo quedaba yo. Todos
los que me importaban habían muerto. Y yo lo había visto.
Continuar historia.
Continuar historia.
PESADILLA (Parte 3)
Tengo una herida que
tiene muy mala pinta en el brazo derecho y la cabeza no para de sangrar. Por no hablar
de que no podía casi mover las piernas. Avanzo como puedo a través del bar,
intentando no mirar a todas aquellas personas, sufriendo, corriendo de un lado
para otro sin saber como reaccionar. Creo que nadie sabría como hacerlo exactamente.
Y entonces es cuando me temo lo peor. No escucho...... nada. Reacciono, y me
percato de que, realmente, desde que salí del agua, no escuchaba nada. Solo
observaba a la gente gritar y llorar. Y suponía lo qué decían, pero no los
escuchaba. Por el contrario, en lugar del sonido de aquella situación,
escuchaba un pitido constante pero muy agudo, casi insonoro, que me ponía los
vellos de punta. Creo.... creo que me había quedado sordo.
Continuar historia.
Continuar historia.
PESADILLA (Parte 2)
Una sensación horrible invade mi cuerpo, lo primero que pasa
por mi mente es: "mi familia ha muerto, y yo soy el siguiente." A continuación
pienso y me aferro a lo más próximo que encuentro mientras notaba el movimiento
del edificio que se desplomaba, cuando me agarro a un escritorio anclado a la
pared me siento un poco más seguro.... pero no dura mucho. El edificio retumba,
y reposa brutalmente sobre la zona de la piscina, totalmente inundada. Noto el
golpe, y la sacudida es tan fuerte que mis brazos se retuercen de dolor, liberándose
de lo que agarraban. Caigo,... caigo, caigo sobre el ventanal que se hace
añicos mientras lo atravieso justo en el momento que el edificio toca suelo por
mi planta, pero en vez de estrellarme contra el suelo frío y duro..... Me
hundo.
Noto como el agua
entra por mi garganta mientras suelto un alarido desconcertante y aterrador. Todo
mi alrededor da vueltas... o más bien soy yo el que no para de girar, y girar, y
verlo todo oscuro, como si todo acabara.... veo una luz..... La sigo.... y en cuanto llego, tomo una gran
bocanada de aire. He salido a la superficie. Veo desastre a mi alrededor,
destrucción, y dolor....veo a todo el
mundo gritar, hay muchos heridos. El edificio que antes era el hotel esta ante
mi, descansando, totalmente destrozado. Me digo a mi mismo que no me puedo
creer lo que está ocurriendo y que
seguro que solo quedo yo. Nado como puedo hasta las escaleras del bar de la
piscina y subo a tierra. El bar no se ha inundado, pero se ve claramente el paso
devastador del propio mar por el lugar. Descansan en su interior unas cuantas
personas bastante heridas, entonces me miro a mi mismo y me doy cuenta de que yo
no estoy tan bien…
Continuar historia.
Continuar historia.
PESADILLA (Parte 1)
Esta historia que os voy a contar, es una pesadilla que tuve la otra noche, como es un poco larga, la divido en siete partes que podéis ver en la columna de la derecha en HISTORIAS/PESADILLA. Un beso y espero que os guste.
Llegamos a nuestro destino. Me llamo Danny, y a mi lado estaba
mi hermano mediano Alex, y mi hermano pequeño David. Delante conducía mi padre,
y junto a él, mi madre. El hotel se situaba en la costa, en una gran torre de
unas 10 plantas, yo estaba en la 8º planta en mi habitación. La pared que daba
al mar tenía un gran ventanal de cristal y si mirabas abajo, veías la zona
de cafeterías y eso. Eran unas casas en forma de U que hacían los diferentes
bares y terrazas, más adelante la piscina del hotel que daba directamente a un
gran mirador hacia el mar. A la derecha de la piscina, bajaba por el mirador
unas escaleras que bajaban a la playa. Yo, estaba con un amigo mio en mi
habitación y estaba saludando a unos amigos y a mi hermano mediano, mientras
que mis padres y mi hermano pequeño estaban en la piscina. Estábamos con el
cachondeo, cuando veo a lo lejos en la costa que una gran masa de agua se abalanza
sobre el balcón de la piscina, entonces mi amigo y yo empezamos a hacerles
señas a los de abajo para que salgan corriendo ya que ellos todavía no lo han
visto por las casas que hay delante. Pero es tarde….
Vemos como el agua los empuja y los estrella
contra la base del edificio y notamos como el edificio retumba y se retuerce. Nosotros
lo primero que pensamos es en tumbarnos en el suelo y sujetarnos la cabeza para
que todo pasase rápido......pero no queda la cosa ahí. De repente me da por
abrir los ojos y observo como las cosas empiezan a deslizarse hacia el lateral
de la ventana.... el edificio se estaba cayendo, y nosotros estábamos dentro.
Continuar historia.
Continuar historia.
Cuando las cosas no pueden ir peor...
A veces pienso porqué sigo siendo así. Soy tonto y siempre lo seguiré siendo. Lo doy todo por los que me rodean, y nadie da nada por mi. Solo unos pocos hacen por lo menos el intento de preocuparse. Y encima sigo dejando que los hilos de mi vida lo controlen otras personas. Nunca aprenderé, sigo siendo el mismo tonto que quiere mucho a los que no debe.....
FRASES PREFERIDAS DE LO IMPOSIBLE
"Cierra los ojos y piensa en algo bonito"
"¿Sabes cuándo he tenido más miedo? Cuando he salido del agua, y me he visto solo ¿Y si mamá y Lucas se encuentran ahora mismo solos? Imagínate lo asustados que estarán..."
"Yo también tengo una familia, y he estado conservando mis fuerzas porque quiero verles, aunque sea una última vez."
"+Creía que era un niño valiente mamá, tengo... miedo. -Shhh, shhh. Yo... también tengo miedo."
"Lucas, ¿ves este hospital? Está desbordado, quiero que ayudes a la gente Lucas, se te da bien."
"+Algunas de esas estrellas dejaron de brillar hace mucho tiempo. -¿Están muertas verdad? +Están muertas, pero su luz sigue viajando por el espacio, y aun podemos verlas. ¿No es un misterio maravilloso?"
"¿Que dónde me he metido? ¡Dónde te has metido tú! Me prometiste que no te ibas a ir. Creía.... creia que estabas muerta..."
"+Mamá, tenemos que ponernos a salvo en ese árbol. Es demasiado tarde, ya no podemos hacer nada. -Lucas, imagina que ese niño es Tomas o Simon, ¿Te gustaria que lo dejasen ahí? +¡Pero mamá...! -Lucas, aunque sea lo último que hagamos."
"No se que hacer, pero tranquilo. Buscaré en todos los hospitales y en todos los refugios. No pararé hasta encontrarlos. Te lo prometo."
"+Asdasjdas hormigas. -¿Está bien? *Sí, está bien, está dormido. Le han mordido las hormigas pero esta bien."
"¿Sabes mamá?, hay algo que quiero decirte. He vuelto a ver a Daniel. Estaba tan feliz. Alguien lo tenía en brazos, apuesto a que era su padre"
"+No, yo he sido el último en salir y no he puesto la alarma. -Bueno, pues entonces nos encontraremos la casa llena de hippies durmiendo en nuestra cama. +¿Como en la universidad?"
"¡A levantarse, es Navidad!" "Gracias cariño, perdón, Santa Claus"
"+Que mandón. - Jeje, ¿Me pregunto a quién habré salido?"
LO IMPOSIBLE, Una historia real, que te conmoverá...
CRÍTICA A LO IMPOSIBLE (SIN SPOILER)
Creo oportuno empezar este blog con una crítica hacia la nueva película de J. A. Bayona: "Lo Imposible" que narra lo que le ocurrió a una familia española durante el devastador tsunami de 2004 del sudeste asiático. Y lo creo porque, esta es una de mis mayores aficiones, el cine.
Martes, 23 de Octubre. Las 17:30h de la tarde. Voy con mi madre. Llegamos a las taquillas y, después de casi tres semanas desde su estreno, la cola para entrar en esta misma película llegaba hasta fuera del centro comercial. Teníamos pensamiento de entrar a la sesión de las 18:10h, eran las 18:35h cuando conseguimos por fin, después de más de una hora de espera, llegar a la taquilla y conseguir nuestra entrada. Entramos en la sala y nos sentamos. La sala está abarrotada, no cabe nadie más. La gente habla, ríe, comenta, etc. Se apagan las luces y comienza la proyección. Todavía se oye el pequeño murmullo de algunos comentarios de la gente, hasta ahora lo normal de todas las películas, excepto por la cola.
Aparecen los títulos de créditos iniciales, y unas frases que, en cuanto las lees, notas una sensación espeluznante que recorre todo tu cuerpo, la piel deja ver todo los poros que tiene, y comienzas a poner TODA tu atención en la pantalla. No se escucha ni respirar en la sala. Durante el resto de la proyección, no se escucha a nadie, a nadie. Todo el mundo contiene la respiración. Se ahogan con los protagonistas sumergidos en las devastadores aguas. Sufren en los momentos más duros de la película. Lloran de emoción y de alegría en esos maravillosos y entrañables momentos que nos regala el increíble director de "El orfanato". Las lágrimas no paraban de salir de mis ojos, y yo no suelo llorar con ninguna película por muy dura y triste que sea, pero esta te toca el corazón, te llega al alma. Momentos inolvidables suceden uno tras otro, y otros momentos tan duros que desearás que nunca vuelva a ocurrir nada parecido. Llega un momento de la película que olvidas que estás en el cine, olvidas que estás viendo una película. Simplemente estás allí, viendolo todo, y sufriendolo también. Los actores de este film lo hacen maravilloso, no dudas de que lo que sienten sea mentira, lo hacen con tanta brillantez, que crees que de verdad sienten lo que sucede. Tanto Naomi Watts, como Ewan McGregor se salen. Pero sobre todo el mérito por mi parte recae en el no tan conocido, Tom Holland. Actor de teatro, que Bayona lo coge para la película, y se sale de todas las espectativas. Una actuación maravillosa, no tiene otras palabras.
Termina el film, la gente no se mueve de sus asientos. Todavía están algo "tocados" por lo que acaban de ver. Algunos siguen desaogándose sin parar de llorar. La gente se levanta, se abrazan unos a otros, pero sin decir ni una sola palabra. ¡Esto no lo había visto en ninguna otra parte! Lo que estaba pasando era maravilloso. Yo le rodeé con mis brazos a mi madre, y ella igual, y nos apretamos mientras llorabamos. COn eso lo decíamos todo. "Te quiero". Salimos de la sala, todos en filas ordenadas, a un mismo ritmo lento y confuso. Pensando, todos pensando, en lo que ocurrió, en lo que sufrieron. Y piensan en lo que se llega a querer a tu familia.
Sigo llorando en mi casa. Es demasiado hermosa. Al día siguiente vuelvo a ir a verla nuevamente las salas están abarrotadas. A la sesión de las 18:10h tampoco podemos entrar a pesar de haber llegado un poco antes para coger sitio en la cola. Las entradas se habían agotado, así que nuevamente entro en la siguiente sesión. Lo mismo. Esta vez lloro más, me doy cuenta de detalles que antes no aprecié. En fin, sin palabras.
Miércoles, 14 de Noviembre. Vuelvo a ir a verla, por tercera vez. Me fascina. Después de un mes y una semana desde su estreno, la sala vuelve a estar completa. Y nuevamente sucede los mismo.
¿Será tal vez porque el simple hecho de pensar que eso les ocurrió de verdad, nos aterra? ¿O quizás porque lo interpretan tan bien, que no cuesta trabajo meternos en su pellejo?
Martes, 23 de Octubre. Las 17:30h de la tarde. Voy con mi madre. Llegamos a las taquillas y, después de casi tres semanas desde su estreno, la cola para entrar en esta misma película llegaba hasta fuera del centro comercial. Teníamos pensamiento de entrar a la sesión de las 18:10h, eran las 18:35h cuando conseguimos por fin, después de más de una hora de espera, llegar a la taquilla y conseguir nuestra entrada. Entramos en la sala y nos sentamos. La sala está abarrotada, no cabe nadie más. La gente habla, ríe, comenta, etc. Se apagan las luces y comienza la proyección. Todavía se oye el pequeño murmullo de algunos comentarios de la gente, hasta ahora lo normal de todas las películas, excepto por la cola.
Aparecen los títulos de créditos iniciales, y unas frases que, en cuanto las lees, notas una sensación espeluznante que recorre todo tu cuerpo, la piel deja ver todo los poros que tiene, y comienzas a poner TODA tu atención en la pantalla. No se escucha ni respirar en la sala. Durante el resto de la proyección, no se escucha a nadie, a nadie. Todo el mundo contiene la respiración. Se ahogan con los protagonistas sumergidos en las devastadores aguas. Sufren en los momentos más duros de la película. Lloran de emoción y de alegría en esos maravillosos y entrañables momentos que nos regala el increíble director de "El orfanato". Las lágrimas no paraban de salir de mis ojos, y yo no suelo llorar con ninguna película por muy dura y triste que sea, pero esta te toca el corazón, te llega al alma. Momentos inolvidables suceden uno tras otro, y otros momentos tan duros que desearás que nunca vuelva a ocurrir nada parecido. Llega un momento de la película que olvidas que estás en el cine, olvidas que estás viendo una película. Simplemente estás allí, viendolo todo, y sufriendolo también. Los actores de este film lo hacen maravilloso, no dudas de que lo que sienten sea mentira, lo hacen con tanta brillantez, que crees que de verdad sienten lo que sucede. Tanto Naomi Watts, como Ewan McGregor se salen. Pero sobre todo el mérito por mi parte recae en el no tan conocido, Tom Holland. Actor de teatro, que Bayona lo coge para la película, y se sale de todas las espectativas. Una actuación maravillosa, no tiene otras palabras.
Termina el film, la gente no se mueve de sus asientos. Todavía están algo "tocados" por lo que acaban de ver. Algunos siguen desaogándose sin parar de llorar. La gente se levanta, se abrazan unos a otros, pero sin decir ni una sola palabra. ¡Esto no lo había visto en ninguna otra parte! Lo que estaba pasando era maravilloso. Yo le rodeé con mis brazos a mi madre, y ella igual, y nos apretamos mientras llorabamos. COn eso lo decíamos todo. "Te quiero". Salimos de la sala, todos en filas ordenadas, a un mismo ritmo lento y confuso. Pensando, todos pensando, en lo que ocurrió, en lo que sufrieron. Y piensan en lo que se llega a querer a tu familia.
Sigo llorando en mi casa. Es demasiado hermosa. Al día siguiente vuelvo a ir a verla nuevamente las salas están abarrotadas. A la sesión de las 18:10h tampoco podemos entrar a pesar de haber llegado un poco antes para coger sitio en la cola. Las entradas se habían agotado, así que nuevamente entro en la siguiente sesión. Lo mismo. Esta vez lloro más, me doy cuenta de detalles que antes no aprecié. En fin, sin palabras.
Miércoles, 14 de Noviembre. Vuelvo a ir a verla, por tercera vez. Me fascina. Después de un mes y una semana desde su estreno, la sala vuelve a estar completa. Y nuevamente sucede los mismo.
¿Será tal vez porque el simple hecho de pensar que eso les ocurrió de verdad, nos aterra? ¿O quizás porque lo interpretan tan bien, que no cuesta trabajo meternos en su pellejo?
La respuesta exacta no la sé, pero si sé, que merece la pena, y que no es una película. Es una forma de hacerte ver la vida, desde otro punto de vista, y hacernos ver, lo mucho, mucho que queremos a nuestra... familia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)